Imagen: wallpapers-for-desk.russia Yulia Fernández Sánchez A lo largo de la historia los humanos hemos canjeado mercancías o servicios por una gran variedad de objetos de valor económico, como ganado, sacos de grano de cereal, conchas, pieles de castores y de otros animales, sal y metales valiosos, entre otros muchos. Con la acuñación de las primeras monedas por lo griegos, aproximadamente entre los años 680 y 560 a.C. en Lidia (en la actual Turquía), los artículos de intercambio se volvieron más efímeros, dando lugar a la expansión monetaria por todo el mundo y, más adelante, al desarrollo del sistema fiduciario. Según los historiadores, los primeros billetes surgieron en Suecia en el siglo XVII, reemplazando poco a poco a la mayoría de las monedas. Tres siglos después, el 27 de junio de 1967, la sucursal londinense del Banco Barclays inauguró el primer cajero automático, que fue creado por Sheperd-Barron y comercializado por la firma británica De La Rue. Desde entonces